domingo, febrero 22, 2009

Síndrome marginal

En algún lugar de la marginación, donde escasean las bondades de las políticas públicas, la insalubridad transmutó en un misterioso padecimiento y la incertidumbre es un síntoma de la pobreza…

Los Santorales es una zona suburbana de alta marginación al poniente de la ciudad de Mexicali, en el estado fronterizo de Baja California. Y en ese entorno persisten rezagos en servicios públicos y condiciones sanitarias, se han registrado trece fallecimientos en los últimos cinco meses y hasta el momento las autoridades sanitarias no han identificado el origen del extraño padecimiento.

En los trece casos se brindó atención médica hospitalaria, todos presentaron los mismos síntomas (fiebre, manchas rojas en la piel, vómito, mareos, dolor de cabeza y resfriado) pero ninguno de ellos respondió al tratamiento, y de acuerdo con las autoridades sanitarias, todos fallecieron por causas diferentes.

La alarma cunde por el número de casos, porque el padecimiento cobró la vida de niños y jóvenes, por la parsimoniosa respuesta de las instituciones del sector salud y porque las autoridades sanitarias decidieron actuar hasta que se registró el octavo fallecimiento.

Dicen los que saben que una epidemia surge cuando se detecta la similitud de síntomas y circunstancias en tres casos; que muchas veces es preciso mantener la calma para no provocar un pánico generalizado; pero que muchas veces, el silencio institucional encubre negligencia, desinterés, impericia.

Ya sea por la cantidad y la frecuencia, o por la ubicación del foco infeccioso, el desempeño de los responsables de la salud pública es deplorable y despierta suspicacias.
Esta situación no es provocada por la histeria colectiva ni es una epidemia de miedo que pueda aliviarse con placebos. Es la evidencia, contundente y lacerante, del olvido gubernamental, de la insensibilidad institucional hacia los sectores marginales.

La sombra de un estado fallido surge cuando el gobierno es superado por los poderes fácticos (mediocracia, crimen organizado, etc.), pero esa sombra adquiere consistencia cuando el estado es insuficiente, o incapaz, para proveer a sus habitantes los servicios sociales básicos (salud, educación, seguridad) a los que está obligado 1.

El padecimiento que aqueja al país es la secuela de los placebos gubernamentales derivados de la demagogia, de un virulento declive en la sensibilidad social, del distanciamiento inexorable entre los que tienen todo y los que nada tienen.

La salud y la educación públicas yacen el fondo del cajón de los olvidos institucionales porque el Estado de Bienestar se ha transfigurado en una mega-gerencia de negocios internacionales; el bienestar social es una quimera que sólo reluce en los discursos de proselitismo, es una vana ilusión mediática en la propaganda gubernamental, porque allá en el lumpen donde pululan los virus de la demagogia… la insalubridad transmutó en un misterioso padecimiento y la incertidumbre es un síntoma de la pobreza…




1. Estado de Bienestar (welfare state) se da cuando el Estado se obliga a asegurar a todos derechos y servicios básicos como la salud, la educación, los servicios sociales, la jubilación, la protección del empleo. Para ello desarrolla ministerios, leyes, presupuestos e instituciones. Luis Ugalde. “Globalización, estado de bienestar y neoliberalismo”

domingo, febrero 15, 2009

El imperio de la conciencia

“A veces no me siento
tan solo
si imagino
mejor dicho si se
que mas allá de mi soledad
y de la tuya
otra vez estas vos
aunque sea preguntándote a solas
que vendrá después
de la soledad.”
Mario Benedetti




En algún lugar de la ausencia, entre el siempre y el jamás, muy cerca del país donde habita el olvido, el aire es un compendio de suspiros y el tiempo una secuencia infinita de insomnios; allá, la multitud es un conglomerado de seres asilados y la faz de la Tierra se fragmenta en un sinfín de islas individuales; es por eso que ahora, el mundo es un archipiélago inconmensurable…


Dicen los que saben, que los habitantes de la era digital están más comunicados que nunca, que la información fluye eludiendo las distancias y abatiendo el tiempo, que este mundo es una aldea regida por la tecnología, y que por eso, el ser humano se refugia en una burbuja virtual, desde donde ve pasar los días de su vida.


La soledad es uno de los efectos colaterales de las tecnologías de la información; pero además, es un padecimiento social estigmatizado, el sinónimo del fracaso y del rechazo, la contradicción del estereotipo vigente. Y en la aldea globalizada donde todo, absolutamente todo, equivale a un precio en el mercado, la soledad es la antípoda del amor y la felicidad. La crueldad de la sociedad de consumo se concentra el Día de San Valentín y excluye a todos aquellos que son no aptos para realizar los rituales del amor y la amistad.


El 14 de Febrero los sentimientos se materializan, la objetivización de los afectos culmina, invariablemente, con un gasto; la cuantía de la erogación determina la dimensión del amor. Y ese día, todos los habitantes de la aldea global sucumben al embrujo de los convencionalismos comerciales masivamente aceptados y socialmente impuestos. Todo lo que el mundo necesita es amor, y ese día, esa necesidad infla millones de globos rojos que pululan en todas las esquinas.


Porque el amor, es ahora, un indicador económico. La tercera encuesta internacional “Can’t buy me love” (No me puedes comprar amor) indica que los mexicanos son los compradores más generosos del mundo cuando de amor se trata.
De acuerdo con un estudio realizado en el portal Parship, vencer la soledad y encontrar pareja implica una inversión económica y un dramático cambio de actitud: el 21% de los solteros mexicanos destina entre 10 y 20 mil pesos al año a la incesante búsqueda del amor, como tratamientos de belleza, salidas para conocer gente, ropa y accesorios, comida e inscripciones a sitios en la Red especializados en citas.


Porque la conversión matemática del cariño y el amor en cifras pecuniarias es una de las manifestaciones de una sociedad materializada, los bemoles actuales del amor coinciden con los dictados del consumismo y la ética del lucro.


Pero la evidencia más contundente del poder del amor como uno de los motores de la economía global es la suspensión del bloqueo sobre Gaza: por primera vez en casi tres años, Gaza exportará a Europa flores para San Valentín, lo que dará un pequeño respiro a los comerciantes de una franja ahogada por un bloqueo inhumano y duramente castigada por la ofensiva militar de Israel. El permiso para exportar este año se debe a los esfuerzos del Gobierno holandés, que envía materiales y financia la producción horticultora. Lamentablemente, el bloqueo no cedió por motivos humanitarios, sino por la inversión extranjera que estaba comprometida.


Sí!... El amor es un negocio, y además, una de tantas actividades asimiladas por el hiper espacio. El sociólogo José Luis Trueba Lara, revisa la historia de las prácticas amatorias desde la antigüedad hasta nuestros días; en su obra “Ensayo en pequeños capítulos” afirma que antes se creía que el amor duraría toda la vida, pero que ahora el amor es fugaz, desechable y carente de compromiso; que lo que fue el arte del amor, es ahora, el arte del truene. Trueba considera que el amor ha perdido terreno ante las nuevas tecnologías y que el mundo ha cambiado la perspectiva porque el amor y el erotismo han sucumbido en la vorágine de la cibernética y del consumo.


Hoy por hoy, los sitios más visitados en la Red son los portales de encuentro y redes sociales. Las citas por internet son una modalidad en expansión de las relaciones humanas, y es también, la evidencia de que la soledad es un padecimiento generalizado.


Yo?... prefiero la versión de los poetas: en esta aldea materializada y deshumanizante, ellos ostentan la única autoridad moral para suministrar el antídoto para la soledad: Benedetti la define como “nuestra propiedad más privada”, Gustavo Adolfo Bécquer la ubica en el “imperio de la conciencia”, Luis Cernuda la confronta y concluye: “cómo llenarte, soledad, sino contigo misma?”, y Jaime Sabines la personaliza y describe a los amorosos como “los insaciables, los que siempre –que bueno- han de estar solos”.

Sea como fuere, es preciso aceptar la soledad como la condición primigenia de los seres humanos, renunciar a considerarla un episodio traumático y convertirla en un lapso de reflexión; si caminamos por los solitarios senderos de la conciencia, tarde o temprano encontraremos nuestra propia identidad. Y allá, en la más privada de nuestras propiedades, ventilar los temores y curar las angustias.

La soledad no es un castigo, y es algo muy diferente al aislamiento deliberado: la lejanía del entorno circundante por la conectividad es la conducta que predomina en la aldea global. Pero es una quimera, porque la interconexión no desvanece la soledad, al contrario: refuerza la burbuja donde habita cada cibernauta, y “así, diseminados pero juntos, cercanos pero ajenos, solos codo con codo, cada uno en su burbuja, insolidarios, envejecen mezquinos como islotes”1… porque el mundo globalizado es un archipiélago inconmensurable…



1 Fragmento del poema “Las soledades de Babel” de Mario Benedetti

domingo, febrero 08, 2009

La comedia electoral

En algún lugar del espectáculo, en un escenario excéntrico, donde la clase política es una elite del protagonismo, la cuarta pared es una barrera etérea, pero impenetrable, que restringe las voces del auditorio; por eso, en la comedia nacional jamás se escucha el eco distante de la ciudadanía…

El proceso electoral 2009 inició con un espectacular desacuerdo entre las televisoras y el Instituto Federal Electoral debido a la interrupción de la programación deportiva del fin de semana para insertar un bloque de mensajes de los partidos políticos.

Este incidente se produjo por las ambigüedades y los vacíos en la reforma electoral, lo que provocó una serie de interpretaciones apresuradas y un forcejeo entre las autoridades electorales y el duopolio televisivo; el episodio culminó con modificaciones improvisadas a la Ley Federal de Radio y Televisión.

El electorado? … No!... El electorado no intervino en ninguna de las decisiones que surgieron en este conflicto de intereses. No se analizaron los niveles de audiencia durante los seis minutos de la interrupción, tampoco se han hecho sondeos de opinión, no se convocó ningún referendo ni se ha propuesto ninguna consulta ciudadana respecto a los horarios de transmisión de los mensajes de los partidos políticos.

La ciudadanía fue considerada como una multitud de telespectadores, y en toda la extensión de la palabra, porque fueron testigos lejanos y expectantes pasivos del primer episodio de la comedia electoral.

La propaganda política en los medios de comunicación masiva se sustenta en un precepto peyorativo, creado en el nazismo, según el cual, el auditorio masivo no tiene memoria selectiva y es manipulable, porque no es capaz de reflexionar cuando se le somete sistemáticamente a mensajes simples, cortos y repetitivos.

En todo el territorio nacional, en vivo y a todo color, en diferentes horarios, en todas las frecuencias y hasta el hartazgo, se transmitieron las insuficiencias en el criterio del legislativo al reformar la ley electoral y se exhibió sin tapujos el perfil mediático de la política: la dependencia imperiosa de los partidos políticos respecto a los medios de comunicación masiva durante el proselitismo.

Y así, el marketing político y el vacío de autoridad para hacer cumplir las leyes serán las directrices del proceso electoral del 2009, que se pronostica como una campaña insufrible de mensajes masivos dirigidos a un electorado cada más desencantado que reprueba la actuación de la clase política.

Así lo demuestra la Primera Encuesta Nacional sobre la Discordia y la Concordia realizada por Zimat Consultores, que indica que los mexicanos reprueban la actuación de la clase política en diez pautas clave. La conducta más reprobable fue la incongruencia entre el decir y el hacer de los políticos, lo que refleja la desconfianza y el recelo del electorado hacia una clase política intolerante, insuficiente, excluyente, distante, incapaz, opaca y ruin. En orden decreciente, las calificaciones fueron:

Tolerancia a diferentes formas de pensar 5.4
Aprobación de leyes que buscan el beneficio común 5.3
Disposición al diálogo y a la negociación 5.2
Rectitud en el comportamiento público y privado 4.9
Respeto a las leyes y las instituciones 4.9
Representación de los intereses de la sociedad 4.7
Capacidad para llegar a acuerdos 4.7
Transparencia y rendición de cuentas 4.6
Cercanía con la ciudadanía para escuchar sus necesidades 4.4
Congruencia con los dicen y lo que hacen 4.2.



Lo único claro en este conflicto de intereses, es la lejanía del electorado respecto a los medios y a la clase política. La voz de los electores no se escuchó en ningún programa de radio o televisión; tampoco se solicitó la participación ciudadana en el congreso, ni en el Instituto Federal Electoral. La decisión de modificar la Ley de Radio y Televisión, como otras tantas reformas y modificaciones a las leyes, se han realizado sin considerar la opinión pública o las necesidades de la ciudadanía.

Para derribar la cuarta pared de este escenario excéntrico y excluyente, será imprescindible el coro plural y diverso de la ciudadanía, elevar la voz de los electorales y hacerla llegar hasta esa élite del cinismo protagónico, porque el predominio del abstencionismo y la apatía han sido los argumentos de esta comedia nacional, en la que jamás se escucha el eco distante de la ciudadanía…

domingo, febrero 01, 2009

El curioso caso de Baja California

"La democracia no es una creencia ni algo trascendente,
sino un método de diálogo enormemente imperfecto;
es el reino de la controversia, del diálogo, del pacto”.
Juán Luis Cebrián


En algún lugar incandescente, en la fragua de la obstinación, se forjan los engranes de un reloj que materializará las ficciones; gracias a un mecanismo excéntrico, será posible avanzar en un sentido contrario al porvenir, eludiendo las semejanzas y enfatizando las discrepancias…

El cuento “El curioso caso de Benjamin Button” escrito por Francis Scott Fitzgerald, se publicó en la revista Collier el 21 de mayo de 1922; en aquel entonces, como ahora, la ficción convertía verosímil lo imposible: el transcurso de una vida en sentido opuesto al curso de la existencia biológica.

Pero en un acontecimiento insólito las ficciones se materializan en el mundo real; la relación excéntrica con el mundo y los retrocesos respecto al porvenir, que configuran el imperecedero mundo narrativo de Scott Fitzgerald, abandonaron el entorno literario para instalarse en Baja California. Hoy por hoy, en el bastión del panismo rampante, el tiempo transcurre hacia el pasado y se avanza en forma retrógrada.

El sentido inverso a las manecillas del reloj es una metáfora para describir la imposición de criterios dogmáticos en las políticas públicas en Baja California. La incursión de intereses sectarios en las decisiones que afectan a todos los ciudadanos obstaculiza todas las vías de la tolerancia y anula todos los avances hacia el acuerdo social porque implica un aberrante retroceso en la historia del pensamiento.

El curioso caso de Baja California es un relato que transcurre de adelante hacia atrás, en dirección opuesta a la tolerancia, y que a la letra, dice así:

Capítulo 1. El ombudsman de Baja California, Francisco Javier Sánchez Corona, acudió ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para pedir la anulación de una reforma a la Constitución local, impulsada por el PAN, PRI y el Panal, mediante la cual estableció que la vida, en esa parte del país, está protegida desde el momento de la concepción. Esta acción de inconstitucionalidad se promovió contra la reforma que cancela la posibilidad de despenalizar el aborto en el estado

La impugnación indica que con esta reforma, en Baja California se equipara “concepción” con “fecundación”, lo que se traduce en la prohibición de la fecundación in vitro, del uso de anticonceptivos (en particular el dispositivo intrauterino) y la investigación de embriones no implantados, entre otros.

El 25 de enero del 2009 la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) admitió la impugnación que promovió la Procuraduría de Derechos Humanos de Baja California contra las reformas a la constitución de la entidad que prohíben despenalizar el aborto.

Capítulo 2. El 22 de enero del 2009 se presentó a la Legislatura de Baja California la iniciativa de reforma a la constitución local que establece a la familia como la base de la sociedad y proteger la unión hombre y mujer como la única que satisface los fines del matrimonio como institución social.

Esta reforma propone que en Baja California, cualquier hipótesis que pretenda socavar la figura jurídica del matrimonio, o que vaya contra la naturaleza humana serán inadmisibles.


Capítulo 3. El 26 de diciembre del 2008 se publicó en el Diario Oficial la reforma al Artículo Séptimo de la constitución del estado de Baja California que reconoce el derecho a la vida y la protege hasta su muerte natural y no inducida, quedando derogada la posibilidad del aborto como lo contemplaba el Código Penal y eliminando las causales para practicarlos en caso de violación, malformación del producto o cuando peligre la vida de la mujer.

Capítulo 4. Paulina del Carmen Ramírez Jacinto, de 13 años de edad fue violada en Mexicali por dos hombres en julio de 1999. Autoridades judiciales y de salud en Baja California impidieron que abortara anteponiendo sus creencias religiosas a las obligaciones legales de sus cargos.

En mayo del 2000 se desató un clima de hostilidad: la iglesia católica se opuso al bautizo de Isaac, el hijo de Paulina, argumentando que la madrina fue excomulgada; y al autor de la recomendación de la Procuraduría de Derechos Humanos y Protección Ciudadana (PDHPC) al gobierno estatal, Federico García Estrada, se le negó el derecho a integrar la terna de la que resultaría el sucesor del titular de la institución, nombrado por el Congreso.

Cinco años después del incidente, ningún funcionario estatal ha sido sancionado por violentar los derechos humanos de la menor a quien obligaron a la maternidad y sólo uno de los dos violadores se encuentra en prisión.

Epílogo. La amenaza de credos intolerantes se extiende perniciosamente. La Defensoría de los Derechos Humanos de Michoacán, denunció el despido de 56 trabajadores de una filial de Arcelor-Mittal, que supuestamente se negaron a participar en una marcha de un grupo sindical por ser Testigos de Jehová.

La moraleja del cuento es que ninguna ley podrá contravenir el principio esencial que equipara a todos los seres humanos, que ninguna reforma debería atentar contra las garantías individuales. La tolerancia debería ser un feliz desenlace de un cuento fantástico que inicia con el obsequio divino del libre albedrío y culmina con la conquista social de la libertad de conciencia y el derecho a decidir.

No obstante, el relato de la democracia podría desintegrarse en un credo intolerante y esfumarse como una ficción inverosímil. En estas circunstancias, la pluralidad es un imperativo: el Legislativo debe reflejar la diversidad de visiones y perspectivas de los mexicanos.

Para avanzar hacia el progreso y materializar el sueño de un mundo mejor, el sufragio efectivo es el único argumento válido para fragmentar los criterios obtusos, la participación ciudadana en las políticas públicas es el conjuro para revertir los estragos de ese mecanismo excéntrico, fraguado en la intolerancia, que nos conduce a la discordia, en sentido contrario al porvenir, eludiendo las semejanzas y enfatizando las discrepancias…