domingo, febrero 18, 2007

Cuestión de Conciencia

En algún lugar del proselitismo, fuera de legendaria tensión entre los opuestos, surge la esperanza ante una opción diferente, una nueva perspectiva que se define lejos de la beligerancia y que se construye sin enconos…

El 14 de Febrero se inició oficialmente la contienda por la gubernatura y el congreso local en el estado mexicano de Baja California. Mucho antes del principio, este proceso electoral ha causado polémica y ha generado expectativas contrastantes debido a las circunstancias de la confrontación del Partido de Acción Nacional (PAN) como partido en el gobierno y el Partido Revolucionario Institucional (PRI) como partido de oposición que intenta recuperar el poder perdido hace 18 años. Cualquier pronóstico es aventurado, pero esta confrontación será una lucha sin cuartel.

Esta contienda se realizará en un marco jurídico plagado de ambigüedades e imprecisiones y será calificada por una institución cuya imparcialidad ha sido cuestionada.

Pero al margen de la lucha entre los opuestos y ajena a la dicotomía izquierda-derecha, que ya resulta arcaica y perniciosa, se construye una opción diferente dirigida al inmenso sector de electores desilusionados.

La geografía electoral del Partido Alternativa Socialdemócrata refleja que, a pesar del alto índice de abstencionismo en Baja California en la elección federal del 2006, existe un amplio sector que les favoreció con el voto.

Por eso ahora, este partido se ubica en una esfera ajena a las campañas de encono y al proselitismo beligerante y presenta un proyecto, realmente alternativo, que consiste en dignificar la política, promoviendo la responsabilidad social como un valor compartido por la ciudadanía.

A partir del reconocimiento de la crisis de convivencia que actualmente flagela a la sociedad bajacaliforniana, el partido Alternativa Socialdemócrata postula que el humanismo debe impregnar las actividades cotidianas en todos los ámbitos, para lograr un desarrollo social sustentado en valores y no en intereses.

Pero si la tendencia ideológica del Partido Socialdemócrata causa una percepción fresca y gratificante, su logística y su funcionamiento son realmente encomiables. De su debilidad financiera surge una de sus fortalezas e intentarán demostrar que la eficacia de una campaña electoral no se sustenta en gastos estratosféricos erogados en la compra masiva de votos.
El objetivo de su proselitismo será la conciencia ciudadana y buscarán la simpatía de un electorado pensante y conciente. Fuera de las instancias en el poder y muy lejos de un feminismo rampante, su oferta implica congruencia, sustentada en la ética como principio rector de su ideología.

Será imprescindible atender el desenvolvimiento del Partido Alternativa Socialdemócrata en el actual proceso electoral, porque este partido navegará contra la corriente: se enfrentará a las inercias del pasado, a la solvencia financiera de sus adversarios, a los privilegios del partido en el gobierno, a un consejo electoral estatal de dudosa imparcialidad y a una institucionalidad sorda que sólo le concede voz.

Sin optimismos exacerbados, creo es posible que las próximas elecciones en Baja California sienten un precedente y sean un referente obligado en el futuro. Desprendiéndome de mis habituales sueños guajiros, considero que las circunstancias actuales, por adversas que parezcan, propiciarán la participación del electorado conciente y espero que la ciudadanía ejerza su capacidad de discernimiento y razone su voto.

Porque en la privacidad de la mampara, el voto no es un producto derivado de la plutocracia ni un engrane en la maquinaria del poder, es la libre manifestación de la conciencia de cada elector, es la expresión del hartazgo por la legendaria tensión entre los opuestos y de la esperanza ante una opción diferente, una nueva perspectiva, lejos de la beligerancia y los enconos…

miércoles, febrero 14, 2007

El amor en los tiempos de Internet

“Los invisibles átomos del aire
en derredor palpitan y se inflaman,
el cielo se deshace en rayos de oro,
la tierra se estremece alborozada,
oigo flotando en olas de armonías
rumor de besos y batir de alas,
mis párpados se cierran... ¿Qué sucede?
—¡Es el amor que pasa!”

Gustavo Adolfo Bécquer


En algún lugar de la fatalidad, en el sitio más inesperado y en el momento menos oportuno, suelen producirse las coincidencias donde se desvanece la soledad existencial; y entonces, cuando los recuerdos se disuelven entre las sombras del porvenir, el amor surge como un sentimiento que abraza la totalidad del destino humano, suspendido del hilo de dos eternidades…

Una de estas tardes, poco antes del ocaso, mientras contemplaba la inverosímil quietud del viento, descubrí a Cupido. Lo encontré al seguir el vuelo caprichoso de los colibríes. Estaba en un árbol, sentadito en una rama buscando un sitio donde guardar su arco y sus flechas, porque aquel, era el último día de sus andanzas como emisario del amor. Cuando notó mi extrañeza ante semejante noticia, me dijo que había decidido cambiar su modus operandi porque ahora el romance surge en la Red en citas a ciegas donde se conectan miles de corazones solitarios. Y que además, ya no quiere desperdiciar el encanto de sus flechas, porque desde que salió a la venta el perfume de feromonas ya nadie cree en el amor a primera vista. Me confesó su desesperanza por la tremenda devaluación que han sufrido los besos, que ahora son tan sólo un gesto frívolo y vacío, porque dejaron de ser aquella incomprensible fusión de dos vidas en el mismo instante.

Me dijo que su desilusión es inmensa porque ya ningún mortal se atreve a tomar la ilógica decisión de sacrificar la libertad en un desplante de pasión y libre albedrío. Añoró aquellos tiempos cuando los poetas escudriñaban, sin éxito, la inexplicable transformación de la posesión en entrega. Recordó la etérea atmósfera del romanticismo, donde se percibía la libertad del espíritu y cuando la fortaleza provenía de la certeza de saberse amado.

Pero me aseguró, que ni tecnología avanzada, ni el mapa del genoma humano lograrían descifrar los misterios del amor; y que no obstante el vertiginoso ritmo de la vida actual, los mortales siempre serán susceptibles a sus estragos, porque el indescriptible juego de influencias entre la atracción y el destino, será una de las grandes incógnitas de la humanidad.

Ese sublime sentimiento que se apodera de nuestra voluntad, que altera la percepción del mundo y que nos enaltece como seres humanos y nos obsesiona con dar lo mejor de nosotros mismos, ya se ha incorporado al hiper espacio: desde una conexión transformará paulatinamente a los cibernautas en enamorados, los besos serán asincrónicos, el romance será ubicuo y el sexo virtual Aquella noche, antes de partir y con un dulce gesto de desconsuelo, Cupido se quitó sus alas y las guardó en el haz del primer rayo de Luna, donde se confunden la realidad y la ficción. Y desde entonces, Cupido es un experto en Informática que navega a través de la anchura de banda disparando saetas de silicio a los incautos, pero ningún ordenador ha logrado codificarlos.

Porque aun en la ubicuidad del Internet… en el sitio más inesperado y en el momento menos oportuno, se producirán las coincidencias donde se desvanecerá la soledad existencial; y entonces, cuando los recuerdos se disuelvan entre las sombras del porvenir, el amor resurgirá como un sentimiento que abraza a la totalidad del destino humano, suspendido en el hilo de dos eternidades…


A todos, absolutamente todos mis lectores:

Ojalá que oigan flotando en olas de armonía,
el rumor de los besos y el batir de las alas de Cupido,
y que el amor sea siempre su fiel compañero.


¡Feliz Día del Amor y la Amistad!

domingo, febrero 04, 2007

La Nueva Semántica

En algún lugar de la academia, cuando los sabios escudriñaban los discursos políticos, descubrieron, entre líneas, una semántica alterna que tergiversa las verdades y una simbología exasperante que codifica las intenciones ocultas…

El lenguaje es el reflejo de la idiosincrasia, es el mosaico donde se amalgaman todos los colores y todas las imágenes de un pueblo, es una expresión viva y cambiante, que se adapta a las circunstancias, las describe y las preserva.

Los vaivenes del pensamiento, las prioridades, las percepciones y las creencias se cristalizan en el lenguaje, y entonces, algunas palabras adquieren una inusitada e impresionante carga significativa en un contexto determinado.

Es por eso, que desde hace siete años, los lingüistas y gramáticos de la Asociación de Academias de la Lengua Española, emprendieron, con rigor y detalle, la actualización de las características gramaticales de la lengua española.

La Nueva Gramática de la Lengua Española contendrá una descripción de áreas dialectales, niveles de lengua y registros. También incluirá la descripción de las principales variedades americanas del español, ejemplos y recomendaciones de uso. La obra de consulta contendrá 50 capítulos, índice temático y glosario de voces técnicas, y su publicación se realizará en la primavera del 2008

Sin embargo, este mega proyecto no ha concluido, porque los sabios pretendieron descifrar el código de un lenguaje alterno, que se practica en el ámbito político. Creyeron imprescindible asignar una infinidad de sustantivos para describir esa realidad paralela habitada por una infra-especie humana que muta cada sexenio y que cada régimen cambia de piel.

Consideraron que en el inframundo de la política han surgido palabrejas que designan por igual, tanto a la insensatez del hablante como a las aberraciones del entorno: verbigracia “sospechosismo” y “compló”.

Analizaron la re-configuración interna de los partidos políticos rumbo a los procesos electorales donde se disputarán ferozmente gubernaturas estatales, como los bastiones de un poder fragmentado, donde han surgido nuevos significados para los sustantivos abstractos “lealtad” y “disciplina”, que ahora designan a la sumisión incondicional.

Establecieron que en la nueva definición del concepto “convicción” desapareció por completo la firmeza y no queda rastro alguno de los ideales. También determinaron que ahora, los adjetivos “militante”, “simpatizante” y “adherente” califican el mimetismo de todos los aspirantes a puestos de elección popular, quienes después de una increíble metamorfosis cambian de partido.

Concluyeron que subsisten aquellos sinónimos que se pretendía archivar en el cajón de los olvidos, como “dedazo” y “candidato oficial”, y que además, ha surgido el pernicioso eufemismo “carisma” para evitar una referencia forzada a la solvencia económica.

Dicen los que saben, que el proyecto avanzaba con el viento en popa, hasta el fatal momento en que los sabios, después de quemarse las pestañas y exprimirse los sesos tratando de descifrar los poemínimos “inefable tarúpido”, “frutal idiotejo”, “iridiscente pendejérrimo”, decidieron por unanimidad, mandar al averno las palabrejas de la demagogia mexicana y excluirlas de la nueva gramática de la lengua española.

Hoy por hoy, el electorado en México, es el único grupo calificado para interpretar todas las voces y para descifrar todos los gestos de la nueva significancia política; labor que exige mucha concentrancia y la combinación de ingenio e ingenuidad para interpretar el sentido de palabras ambiguas en leyes electorales mal redactadas, en normas jurídicas sin lógica, sin gramática ni sintaxis, que exhiben la ineptitud de los legisladores, quienes al conjugar los adverbios inventaron… una semántica alterna que tergiversa las verdades y una simbología exasperante que codifica las intenciones ocultas…