domingo, noviembre 18, 2012

El prodigio de la ficción


Dedicada a Rosana Silva Di Giacomo,  a Mercedes González y a todos los escritores y artistas del Instituto Cultural Latinoamericano en Junín, Provincia de Buenos Aires, Argentina.

 

            En algún lugar imaginario, trascendiendo el  umbral de lo tangible se extiende el valle de las ficciones, y ahí,  residen seres excepcionales que se enfrentan a circunstancias extraordinarias, protagonistas de todos los afanes que venturosamente llegan al desenlace de mil y un argumentos…

 

            La habilidad para crear momentos y eventos inexistentes surgió con las primeras ideas en una mezcla volátil de miedos y visiones ancestrales que aligeró la soledad existencial de la única especie que adquirió el hábito de escudriñar los rincones de su conciencia. Desde entonces, las miradas de los soñadores empedernidos se han deslizado  por las líneas imaginarias del destino.

 

            Hoy por hoy, en la aldea global se materializan las excentricidades que alguna vez fueron ficciones: millones de individualidades se entrelazan en el ciberespacio enviando mensajes incesantes con etiqueta de urgentes pero  la inmediatez ha simplificado a las ideas en grafos y a las palabras en unas cuantas letras y esta reducción atrofia irremediablemente al nervio crítico; la omnipresencia de los consorcios mediáticos manipula el criterio del auditorio cautivo implantando actitudes y pautas de conducta… tal vez, dentro de algunos años se imponga la destrucción del raciocinio como una política pública, se criminalice la lectura y  la letra escrita se someterá a la inclemencia de devastadora de los 451° Fahrenheit… porque  los desvaríos de los hombres siempre han superado al frenesí literario de las ficciones y no es improbable que un futuro, en el masivo y globalizado siglo XXI, la lectura y la escritura lleguen a ser consideradas conductas subversivas y amenazas para las dictaduras del mercado.

 

            Pero aún en la inmediatez y a pesar de la trivialización galopante, en un resquicio de la aldea global se cumplen las leyes darwinianas: los especímenes hípermodernos se adaptan a las condiciones del entorno digital y en miles y miles de micro-mensajes la conciencia colectiva recupera la lucidez. Como un sentido homenaje a José Saramago, el  baluarte del pensamiento crítico  que este Noviembre estaría celebrando sus 90 años, sus lectores recuperaron las partes significativas de su pensamiento y las comprimieron en 140 caracteres  con la etiqueta #saramago.

 

            Y así, en escenarios desconcertantes y en condiciones delirantes, los especímenes pensantes se adaptan a las inclemencias de un entorno idiotizante, algunos escriben para despabilar a las conciencias adormecidas hilvanando las peripecias de seres excepcionales que se enfrentan a circunstancias extraordinarias, y otros, realizan el prodigio de nuestra especie cuando leen y recrean en su mente los afanes de los protagonistas que venturosamente llegan al desenlace de mil y un argumentos…

 

No hay comentarios.: