90 segundos

En algún lugar restringido, donde se redactan las versiones oficiales, existe un molde incuestionable al que se someten todos los acontecimientos; y así, por el artificio de la censura, se eliminan los errores al reconstruir falsas proezas, y se ocultan los horrores para erigir héroes apócrifos…

El operativo News Divine era uno de tantos operativos mediáticos de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal diseñado, exclusivamente, para difundir las acciones de ese gobierno contra la delincuencia. Se implementó sin tácticas de inteligencia, se planeó sin estrategias policiacas, y se ejecutó aplicando medidas excesivas, porque todos los indicios de brutalidad y negligencia serían convenientemente editados en la versión oficial de la videograbación realizada por la Secretaría de Seguridad Pública.

El operativo se autorizó para verificar varias quejas de venta de alcohol a menores de edad y por la presunción de la venta de metanfetaminas. Pero lo que se pretendía que fuera un acierto de la fuerza pública resultó ser una secuencia de negligencias y abusos. Este desastroso operativo ocasionó un tumulto donde fallecieron nueve jóvenes y tres agentes policiacos.

Ante la imposibilidad de difundir este operativo como un acierto de las autoridades, se optó por distorsionar los hechos. El video editado por la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal, que fue proporcionado a todos los medios de comunicación, reduce a 90 segundos de desinformación la realidad del operativo en el antro News Divine, porque elimina las escenas de la desesperación de los jóvenes por salir del antro, la confusión en las afueras, en la calle, donde se depositaron los cadáveres de las víctimas.

El video editado inicia en la tarde, aproximadamente a las 5:00 PM, en las afueras del antro cuando ingresan los agentes policiacos; otra toma muestra al dueño del establecimiento hablando con las autoridades; mientras se enfoca un letrero que niega la venta de bebida alcohólicas a menores de edad se escucha el anuncio para desalojar el lugar; se muestran breves imágenes del tumulto de los jóvenes tratando de salir del antro. Después: la censura. Se presentan varias imágenes del antro ya vacío y finaliza con tomas afuera del lugar, ya de noche, sin mostrar las consecuencias del operativo ni los trágicos resultados.

En esos 90 segundos se pretendió omitir el uso excesivo de la fuerza: el caos se originó porque los policías, algunos de ellos con pasamontañas, entraron con armas largas, a gritos, y sometieron a los jóvenes con golpes. Los policías cerraron las puertas y crearon un tapón, mientras en el interior otros elementos golpeaban contra láminas y gritaban insultos.

En la edición, se cortaron las escenas donde se aprecia al dueño pidiendo a los jóvenes que desalojen el lugar sin incitarlos al desorden ni a la violencia; se eliminó la toma donde los jóvenes bajan las escaleras en orden hasta topar con los policías quienes los empiezan a agredir y cierran las puertas.

A diferencia de otros operativos mediáticos con resultados espectaculares, como las expropiaciones de los inmuebles en Tepito y en Iztapalapa, donde los implicados eran presuntos delincuentes, en el operativo News Divine los involucrados eran jóvenes, y menores de edad, cuyo único delito fue concurrir a una tardeada en un antro de una colonia popular.

Debido a la edad y a la condición de las víctimas, la realidad anuló la mentira editada en la versión oficial. Inmediatamente después de la difusión del video de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal, SSP-DF, surgieron videos sin ediciones que exhibieron todas las impericias y los abusos de las fuerzas policiacas y la secuencia real de los acontecimientos.

Las declaraciones de los testigos presenciales, la difusión del fichaje ilegal de las jóvenes detenidas, quienes denunciaron los abusos cometidos por las autoridades, entre otros testimonios, desmintieron la versión oficiosa editada en 90 segundos.

Sí! … Es decepcionante la reacción de los funcionarios implicados, es insultante la serie de pretextos esgrimidos por las autoridades.

Nadie afronta la responsabilidad jurídica debido a la cercanía de las elecciones intermedias; pero esta secuencia de abusos, impericias y negligencias exhibe esa tendencia perniciosa y persistente de difundir los aciertos, prefabricados y exacerbados, de la elite gobernante; esta tragedia denuncia ese vicio mediático y artificioso de la censura, que elimina los errores al reconstruir falsas proezas, que oculta los horrores para erigir héroes apócrifos…